martes, 18 de enero de 2011

JACOBIANO

Desconchados muros encalados de una catedral insoportable.


Altas esferas cintilando en un desorden de cristalinas cigarras ebrias.


Hoplitas vencidos en el bronce eterno de un museo lúgubre y sangriento.


Resplandecientes piedras pulidas bajo la lluvia inclemente del aguacero bíblico.


Artificios de barro greda arcilla hundidos en el cántaro del mar de los vientos.


Virulencias de saurios alados sobre el silencioso campanario derrumbado.


Desinencias secretas susurrando escondidas tras un lexema ilegible.


Destrucciones pretéritas de inhóspitos territorios segados por los fuegos meteóricos.


Encendidos magmas basálticos derramados en el valle de sombra de muerte.


Trabados silogismos derrotados por oscuras bandadas de azores corruptos.

No hay comentarios: